RD.- El joven José Luis Mañón Figuereo, de 20 años, a quien la Policía Nacional ultimó este martes junto a Rubén Darío Jiménez “era su acompañante y quien lo encubría”, mientras estuvo prófugo tras asesinar a su expareja y a tres familiares de ella.
Mañón recibió cuatro impactos de balas y Jiménez ocho, conforme al médico legista que se encargó del levantamiento de los cadáveres, lo cual ocurrió pasadas las 4:30 de la tarde. Fueron llevados al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif).
Rubén Darío Jiménez tenía varios días prófugo. Se dio a la fuga luego de asesinar a tiros a su expareja, a los padres de ésta, así como a su cuñado. Una hermana también fue he-ri-da de bala en la cabeza, pero salvó la vida.
“Nuestros investigadores descubrieron que el presunto asesino estaba escondido en la cabaña Presidente de la autopista de San Isidro, al llegar fueron recibidos a tiros por lo que repelieron la agresión”, indicó en la nota.
La Policía dijo en la nota de prensa que en la escena recuperó dos armas ilegales, una tipo pistola y otra escopeta, además de tres teléfonos celulares y un vehículo que utilizaba el presunto infractor (Jiménez) para movilizarse en la zona junto a su acompañante.
Sobre los agentes heridos, la uniformada dijo que se trata de un sargento, el cual afirmó que recibió dos im-pactos de bala en el abdomen y otro en una pierna, “dis-pa-ros que lo mantienen bajo un diagnostico reservado”
El otro lesionado es un cabo, quien “se encuentra en condición estable en el hospital general docente de la Policía Nacional”.
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